En un mundo cada vez más dependiente de la tecnología de la información (TI), la búsqueda de la eficiencia y la sostenibilidad se ha vuelto más urgente que nunca. La creciente conciencia sobre el cambio climático y sus impactos adversos ha llevado a un enfoque renovado en la adopción de prácticas empresariales responsables, especialmente en el ámbito de la tecnología. La sustentabilidad financiera en TI se ha convertido en un objetivo esencial para las empresas modernas, y una de las formas más importantes de lograrlo es reducir la huella de carbono relacionada con la adquisición de recursos de TI.