El contraste principal entre estos esquemas es que Capex requiere una fuerte inversión al momento de adquirir, mientras que Opex puede financiarse durante un periodo extendido. Pero hay otras particularidades que distinguen a cada uno.
Las áreas financieras de los negocios deben tomar decisiones clave al momento de elegir cómo se asignan recursos en materia de tecnología. El dilema de invertir en una modalidad tradicional Capex o en un esquema flexible Opex puede causar ciertas dudas y tensión.
La tecnología avanza rápidamente y las exigencias para las diferentes industrias aumentan de igual manera. El despliegue de TI en un entorno cada vez más competitivo requiere mayores niveles de dinamismo, flexibilidad y, sobre todo, eficiencia en costos.
Por lo anterior, a menudo se comparan los modelos Capex y Opex. ¿Cuál es más rentable? ¿En qué contexto conviene uno u otro? ¿Cuál es la tendencia global en relación con ambas modalidades? Revisemos con detenimiento cada una.
Capex (capital expenditures): la propiedad de los bienes
Los gastos de capital (capital expenditures) representan activos fijos. Estos incluyen inmuebles, infraestructura, maquinaria y equipo electrónico o de cómputo.
Algunos de estos bienes se deprecian con el paso de los años y terminan por requerir gastos adicionales a su costo de adquisición. A esto se le conoce como Costo Total de Propiedad (CTP). Incluye gastos de mantenimiento, renovación de contratos, licencias o seguros, entre otros, dependiendo el producto o activo.
Son inversiones pensadas, generalmente, a largo plazo. No obstante, implican grandes presupuestos e importantes sumas de capital que deben pagarse, por lo regular, en una sola exhibición.
Este tipo de adquisiciones suelen presentarse en momentos de expansión de un negocio o cuando se debe reemplazar equipo antiguo.
“Capex utiliza recursos de la empresa de forma inmediata. En el ‘momento cero’, desembolsas una gran cantidad de dinero para hacerte de equipo de cómputo”, apunta Alejandro Margain, financial account manager de Hewlett Packard Enterprise, refiriéndose al escenario específico de TI.
Opex (operational expenditures): los gastos del día a día
Como lo indica su nombre, el término gastos operativos (Opex) se refiere a los costos asociados a la operación continua de uno o varios servicios o productos dentro de una organización.
Se trata de una inversión permanente, aunque de menor impacto, que puede existir en diversos contextos: desde rentar una propiedad como vivienda y mantener en buen estado un vehículo arrendado, hasta el consumo de TI de una empresa y la provisión de dispositivos y herramientas para toda una plantilla laboral.
En Opex, el financiamiento o arrendamiento y su inversión correspondiente son programados durante un tiempo determinado, el cual es establecido por el cliente.
La modalidad DaaS (Device as a Service) está directamente ligada a Opex. Busca aumentar la eficiencia operativa y maximizar la productividad con el menor costo operativo posible.
Por último, pero no menos relevante, el esquema Opex tiene un importante beneficio fiscal: la renta es 100% deducible de impuestos. Va al costo integral de financiamiento como un gasto y disminuye la base gravable. Es, sin duda, uno de los rasgos más atractivos para proyectos empresariales pequeños, medianos y grandes.
Los esquemas DaaS que ofrecemos en Perceptron
En Perceptron contamos con un plan de arrendamiento puro vinculado a un valor residual muy alto. También está el arrendamiento puro con un valor residual muy bajo (arrendamiento full payout) y un crédito simple. Es básicamente una compra a plazos; el cliente se convierte en el dueño final del equipo.
“Para ofrecer un buen esquema de financiamiento debemos conocer las necesidades del cliente, qué es lo que quiere. Si solo desea usar una tecnología, pero no comprarla, el arrendamiento puro funciona perfectamente”, señala Alejandro Margain.
En este modelo, el cliente utiliza el dispositivo durante un tiempo determinado y al final es libre de hacer lo que desee con este: regresarlo, extender el plazo de uso o sustituirlo por uno nuevo. La mayor ventaja de esto es que el usuario siempre tendrá acceso garantizado a tecnología reciente, competitiva y renovada.
Para algunos clientes, un periodo de tres años no basta: a veces buscan ciclos de uso de hasta un lustro. En esos casos Perceptron, a través de HP Financial Services, extiende las garantías correspondientes desde el principio para así cubrir cinco años de servicio. El objetivo es satisfacer en todo momento las necesidades cambiantes de nuestros clientes.
Opex: más vigente que nunca
Ante la incertidumbre a causa de la crisis por el covid, Opex representa una alternativa atractiva y flexible que puede contribuir a preservar la liquidez financiera de una empresa. Es una manera de seguir invirtiendo sin comprometer altos montos de capital en un escenario incierto.
De una manera similar a los automóviles, los equipos de cómputo se deprecian rápidamente. En consecuencia, es cada vez más clara la ventaja de rentar o arrendar estos dispositivos en lugar de comprarlos: justo como todo aquello que representa una depreciación acelerada.
En México y otros países, lentamente desaparece la cultura de propiedad o apego hacia los dispositivos de cómputo, pues su ciclo de vida es cada vez más corto: laptops, PCs de escritorio, tablets, smartphones.
El uso de elementos físicos como servidores propios está siendo reemplazado también por alternativas más prácticas como las soluciones en la nube.
Cada vez más negocios se dan cuenta de que no es práctico acumular equipo obsoleto en bodegas. Es, de hecho, contraproducente y costoso, por los gastos de mantenimiento y limpieza que esto requiere tarde o temprano.
Opex opta por un despliegue de hardware, software e infraestructura que fluye de manera más eficiente. Se convierte en un proceso simplificado y deja de ser una tediosa sucesión de trámites y laboriosas tareas para las áreas de TI.
En Perceptron, por ejemplo, una solicitud y autorización de arrendamiento es bastante sencilla y requiere de tan sólo tres documentos: carta a buró de crédito, la información financiera general de la empresa y su aprobación legal.
Para saber más, consulta a nuestro equipo de expertos. Con el respaldo de HP Device as a Service, nos aseguraremos de planear una solución tecnológica integral pensada específicamente para tu proyecto y sus necesidades particulares. Haremos mucho más sencilla la operación tecnológica de tu negocio.